La Golden: la estrella de los postres caseros

Si hay una manzana que ha ganado el corazón de cocineras y cocineros de casa nuestra, esta es la Golden. Su dulzura natural, el color amarillo verdoso con una ligera tonalidad dorada y su textura crujiente y jugosa la convierten en una de las variedades más versátiles y queridas, sobre todo cuando hablamos de postres tradicionales.

En la cocina de casa, la Golden tiene un papel protagonista desde hace décadas. Es ideal para preparar pasteles, compotas o manzanas al horno, pero también se adapta a recetas saladas y platos de temporada.

Recetas que no pasan de moda

Un buen pastel de manzana hecho con Golden conserva su gusto dulce sin necesidad de añadir mucho azúcar. Además, mantiene la forma y se carameliza suavemente, aportando una textura irresistible. En el caso de la compota de manzana, la pulpa se deshace con facilidad y ofrece una melosidad natural perfecta para acompañar yogures, quesos frescos o platos de carne. Y si hablamos de manzanas al horno, con un poco de miel, canela y frutos secos se convierte en unos postres saludables y muy gustosos.

La manzana Golden en la cocina catalana

A pesar de que a menudo lo asociamos a la repostería, la Golden también tiene mucho que decir dentro de la cocina catalana tradicional. Es ideal para reinterpretar platos clásicos y darles un toque fresco y natural:
• El pato con manzana, elaborado habitualmente con variedades más ácidas, gana un punto más meloso y suave con Golden.
• El trinchado de la Cerdaña con manzana salteada aporta contraste y una textura que equilibra el conjunto.
• E incluso la coca de recaudo, si añadimos láminas finas de Golden, gana una nueva dimensión entre el dulce y el salado.

Una variedad con carácter

En Giropoma, se cultiva bajo los estándares de calidad de la IGP Manzana de Girona, hecho que garantiza no solo su origen y frescura, sino también el compromiso con una producción sostenible, respetuosa con la tierra y con el consumidor.

Sus calidades organolépticas son claras: un gusto dulce y equilibrado con un toque ligeramente ácido, una pulpa blanca y consistente, y muy aromática.
Además de la Golden, la empresa productora y comercializadora de manzanas también produce la Fuji, la Gala, la Red Delicious y la Granny Smith, todas reconocidas dentro de la IGP Manzana de Girona. Y también variedades club como la Cripps Pink, comercializada como Pink Lady®, la Regalyou, como Candine® y la Cripps Red, como Joya®.

El papel de los insectos en la producción de manzanas

Los insectos tienen un papel fundamental en el ciclo productivo de los manzanos y forman parte de un equilibrio natural que hay que entender, gestionar y preservar. Giropoma trabaja con un modelo que pose en valor la sostenibilidad, la biodiversidad y el respeto por el medio ambiente, todo integrando prácticas que favorecen los insectos útiles.

Los principales insectos beneficiosos presentes en los campos son los polinizadores, como las abejas y abejones, que juegan un papel esencial en el proceso de polinización de las flores de los manzanos. Una polinización adecuada contribuye directamente a una mejor cantidad y calidad del fruto, influyendo en aspectos como el calibre y la simetría de las manzanas.

Por otro lado, hay una gran variedad de insectos que actúan como auxiliares naturales en el control de plagas, entre los cuales destacan los sírfids, mariquitas, crisopes y vespas parasitoides. Estos organismos ayudan a reducir la presencia de insectos nocivos en los campos de manera natural, favoreciendo una producción más respetuosa con el entorno.

En Giropoma se siguen los principios de la producción integrada, un sistema de cultivo que combina eficiencia agronómica con respeto por el medio ambiente. En este marco, todas las acciones que se llevan a cabo en los campos se planifican y se ejecutan teniendo en cuenta el impacto que pueden tener sobre los insectos beneficiosos, con el objetivo de preservar la actividad y garantizar la continuidad.

Con la voluntad de conservar y mejorar los hábitats de estos insectos, se implementan varias medidas concretas:

• Cubiertas vegetales con vegetación espontánea o sembrada, entre las líneas de manzanos, implantadas a todas nuestras fincas.
• Respeto por los márgenes naturales de las explotaciones, que actúan como corredores ecológicos y refugios de biodiversidad.
• Instalación puntual de hoteles de insectos en determinadas fincas, con el objetivo de ofrecer espacios de nidificación y refugio para los insectos útiles.

La integración de estos elementos en la gestión agraria forma parte del compromiso de la compañía con una producción sostenible y responsable, que prioriza no solo la calidad del producto, sino también la conservación de los recursos naturales y la biodiversidad. Proteger los insectos no es solo una necesidad para la producción, sino también una manera de actuar con responsabilidad hacia el territorio y las generaciones futuras.